lunes, 10 de enero de 2022
Dimitri Nicolau Gutierrez
Cofounder & CEO | Viterbit
El próximo 14 de enero se cumplen 365 días de la fundación oficial de Viterbit: pacto de socios, registro civil, notaría, etc. Ya sabéis. Parece que fue ayer cuando el que se convertiría en nuestro primer cliente introdujo los datos de su tarjeta y contrató nuestro plan Starter: 99 € y una sensación increíble.
Han sido 365 días de mucho trabajo, compromiso y total devoción. Soy de los que piensa que el principal factor detrás de cualquier éxito es la dedicación y el esfuerzo: “Try and try until you succeed”. Hemos crecido mucho en este tiempo y, como equipo, creo que logramos cada día lo increíble. Pero aún así nos quedan muchas montañas por escalar para transformar nuestra startup en un negocio rentable.
Intentaré dar un paso atrás y compartir humildemente “el caos controlado” que ha supuesto este primer año.
Empresa
Hemos desarrollado un producto muy top, muy rápido. Sí, hemos sido muy rápidos y, en apenas un año, hemos logrado tener un producto muy potente pero al mismo tiempo muy sencillo, muy fácil de usar.
La selección de personal está en auge y está cambiando muy rápido. El objetivo inicial no solo era desarrollar una plataforma que intentase solucionar los problemas actuales, sino que también fuese capaz de adaptarse a las nuevas necesidades. Y lo estamos logrando. Nos sentimos orgullosos de nuestro producto y del valor que aportamos siguiendo el feedback de nuestros clientes. Nos queda mucho por hacer. Justamente hoy hemos publicado nuestro roadmap y ya nuestros clientes pueden solicitar nuevas funcionalidades, así como conocer los tiempos y prioridades de desarrollo. Transparencia total.
Dejando a un lado la parte más técnica:
Vida Personal
Como fundador, pocas veces puedes desconectar del todo. Siempre hay un fuego que apagar. Profesionalmente he tenido que reinventarme. Las líneas de código han quedado atrás y me he dedicado a vender Viterbit (algo que no se me ha dado del todo mal, pero el margen de mejora es infinito). Por otro lado, construir un producto, un equipo y procedimientos desde cero, requiere mucho más de 12 horas de trabajo al día. Ha sido duro, pero no puedo dejar de reconocer que lo he disfrutado muchísimo. Si bien intenté alcanzar un equilibrio entre Viterbit y mi vida personal, a día de hoy no lo he logrado. Algo que mejorar en el 2022 sin dudas. De todas formas lo mejor está por llegar. Seré padre en Junio, así que ese equilibrio del que hablaba antes lo encontraré de todas todas. Garantizado.
Futuro El futuro es emocionante e inevitable, fasten your seat belts.
En Viterbit vemos un futuro desbordado de talento y diversidad. Creemos en el poder del talento, en el potencial de las personas para superarse y hacer algo asombroso, y queremos ser parte del viaje. Espero que sea increíble para todo nuestro equipo, clientes, partners y todos los que se unirán en el camino.
Para mí ya está siendo un inicio genial. ¿Nos acompañas?