Principales características de la generación Z en el trabajo

¿Quiénes forman parte de la generación Z?

La generación Z generalmente se refiere a las personas nacidas a partir de mediados de la década de 1990 hasta mediados o finales de la década de 2010. No hay un consenso absoluto sobre las fechas exactas que delimitan a la generación Z pero, en general, se considera que esta generación abarca desde aproximadamente 1995 hasta alrededor de 2010, o incluso hasta 2015 en algunas definiciones más amplias.

Dado que las generaciones son conceptos generales y no tienen fronteras precisas, es importante recordar que las características y las experiencias de las personas pueden variar ampliamente dentro de una misma generación debido a factores como la ubicación geográfica, el entorno cultural y social, entre otros.

Características principales de la generación Z

1. Tecnológicamente nativos:

La Generación Z ha crecido en un entorno digital desde su infancia. Son expertos en tecnología, lo que los convierte en una valiosa fuente de conocimiento en áreas relacionadas con la innovación y la adaptación a las últimas tendencias tecnológicas. Son hábiles en el uso de redes sociales, herramientas de colaboración en línea y aplicaciones de productividad.

2. Mentalidad emprendedora:

Esta generación ha sido testigo del éxito de jóvenes emprendedores y startups. Como resultado, muchos de ellos tienen una mentalidad emprendedora desde una edad temprana. Están dispuestos a asumir riesgos y a buscar oportunidades para innovar y crear soluciones.

3. Diversidad e inclusión:

La Generación Z valora la diversidad en el lugar de trabajo y la inclusión como un aspecto fundamental. Buscan entornos laborales que promuevan la igualdad de oportunidades y la representación de diversas culturas, géneros y antecedentes. Esto puede llevar a una mayor creatividad y perspectivas diversas en equipos de trabajo.

4. Flexibilidad y equilibrio entre trabajo y vida personal:

La Generación Z valora el equilibrio entre trabajo y vida personal y busca trabajos que les permitan tener flexibilidad en sus horarios y ubicación. Esto puede influir en la adopción de políticas de trabajo remoto y horarios más flexibles en las empresas.

5. Habilidades de comunicación:

Aunque son nativos digitales, la Generación Z también valora las habilidades de comunicación interpersonal. Prefieren la comunicación directa y auténtica, lo que puede llevar a una mayor transparencia en la comunicación interna de las empresas.

6. Aprendizaje continuo:

La Generación Z tiene una sed de conocimiento constante. Están dispuestos a aprender nuevas habilidades y adquirir nuevos conocimientos para mantenerse actualizados en un mundo laboral en constante cambio. Las empresas pueden fomentar esta característica ofreciendo oportunidades de desarrollo profesional y capacitación continua.

7. Impacto social:

Se sienten comprometidos con causas sociales y ambientales. Buscan empresas que compartan sus valores y que estén comprometidas con la responsabilidad social corporativa. Esto puede influir en la toma de decisiones de compra y en la reputación de la empresa.

¿Qué valora esta generación a la hora de trabajar?

Los jóvenes pertenecientes a la generación Z tienen una profunda conexión con los valores que consideran fundamentales y esperan que estas convicciones estén reflejadas en las empresas donde trabajan. La justicia social, la lucha contra el cambio climático, la igualdad de género y la sostenibilidad son solo algunos ejemplos de los principios que valoran.

Más allá de simples promesas vacías, la generación Z busca autenticidad y no se deja engañar por prácticas superficiales de "greenwashing" o esfuerzos éticos sin sustancia por parte de empresas con cuestionable reputación social.

En un momento en el que la competencia por el talento es feroz, comprender y abrazar estas prioridades en los valores de la juventud es esencial para construir organizaciones sólidas y con un futuro promisorio. Las empresas que demuestran un compromiso real con causas sociales y ambientales, y que crean un ambiente de trabajo inclusivo y acogedor, tienen una ventaja competitiva en la atracción de talento joven y la construcción de una base de empleados leales y comprometidos.

¿Qué aspectos harían que una persona de esta generación renunciara a su trabajo?

Según el informe reciente de Randstad Workmonitor 2023, los trabajos que obstaculizan una calidad de vida satisfactoria están perdiendo atractivo a pasos agigantados. Esto es particularmente notorio entre los jóvenes de 18 a 24 años, donde un sorprendente 58% de los encuestados afirma que estaría dispuesto a dejar su empleo si no garantiza un nivel adecuado de calidad de vida. A medida que la edad de los encuestados aumenta, la cifra disminuye, lo que sugiere que los jóvenes son los más conscientes de la importancia de salvaguardar su vida personal, incluso si todavía no cuentan con una amplia experiencia laboral.

Sin embargo, existe una fase previa a la renuncia que puede prolongarse indefinidamente: el "abandono silencioso". Esta etapa se caracteriza por hacer lo estrictamente necesario para mantenerse en el trabajo antes de ser invitado a abandonar la empresa (o ser despedido por falta de productividad). Curiosamente, un 36% de los encuestados de entre 18 y 36 años admitió que adoptaría esta actitud si la empresa no logra motivarlos lo suficiente para un compromiso total.

Por esta razón, es crucial que las empresas reevalúen y actualicen sus políticas internas para retener al 38% de los trabajadores que no dudarían en dejar sus empleos. Perder este considerable potencial de talento es una pérdida lamentable que las organizaciones deben evitar a toda costa.

Además, las relaciones entre las empresas y sus empleados deben centrarse en la flexibilidad y la creación de un entorno de trabajo atractivo para los nuevos talentos. Esto incluye la adopción de horarios híbridos, combinando el trabajo remoto con la presencialidad, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los empleados en todas las etapas.